Cooperación
Desde bases renovadas de internacionalismo y de solidaridad podemos redefinir en nuestra esfera la cooperación como uno de los aspectos de la acción sindical internacional dirigida a la consecución de un proceso de desarrollo sostenible e integrado a nivel mundial. Esta cooperación sindical, con todos sus rasgos específicos, tiene una personalidad diferenciada nítidamente de ese subterfugio de la neocolonización que es la ayuda internacional de determinadas potencias.
La justificación más importante para la cooperación sindical al desarrollo se encuentra en el papel que juegan o potencialmente pueden jugar los sindicatos en el desarrollo sostenible y humano:
- En el ámbito político, porque no es posible concebir un proceso de desarrollo sin democracia y respeto a los derechos humanos, lo que lleva implícito el ejercicio de participación política y sindical.
- En el ámbito social, los sindicatos son uno de los tres pilares del “tripartismo” junto con los gobiernos y empresariado para garantizar el dialogo social democrático.
- En el ámbito económico, porque el concepto de desarrollo incluye el de la equidad que debe acompañar al proceso de desarrollo humano sostenible. El desarrollo entendido como “proceso de ampliación de las opciones humanas, que permita a la gente vivir una vida larga, sana y creativa”, necesita de los sindicatos para establecer un diálogo social que lleve al reparto del crecimiento.